Sobre la revista
Edición: Unidad Académica Facultad de Historia
Editor en jefe: Dra. Venecia Citlali Lara Caldera
Descripción: Es una publicación científica que promueve el conocimiento de las investigaciones en procesos históricos de México e Iberoamérica a partir de un diálogo interdisciplinario con las Ciencias Sociales y Humanas.
Acepta artículos originales producto de resultados de investigación o reflexión acerca de problemas de diferentes latitudes y temporalidades que asuman la perspectiva histórica como una forma de problematizar los fenómenos sociales; así mismo, considera reseñas críticas que propongan una relación entre nuevas obras y campos investigativos vigentes. El arbitraje se realiza con la modalidad de doble ciego. Escripta no cobra a los autores por el envío, procesamiento o publicación de sus artículos.
Se encuentra respaldada institucionalmente por los cuerpos académicos que conforman los posgrados, maestría y doctorado, de la Facultad de Historia de la Universidad Autónoma de Sinaloa, C.A. Historia Socio-Cultural (Nivel Consolidado), C.A de Historia Social y Económica (Consolidado) y C.A de Historia de las Ideas y las Instituciones (Consolidado).
Objetivo: Contribuir al conocimiento científico a través de las publicaciones inéditas y originales en el campo de la Historia y Ciencias Sociales.
Periodicidad: Semestral
País: México
Enfoque: Fomentar la publicación de contribuciones originales en el campo de la historia y de las ciencias sociales que representen una contribución al debate y conocimiento histórico académico
Criterios de revisión: Revisión por pares (Doble ciego)
Modalidad: Acceso Abierto Diamante (Diamond OA)
Tarifa de publicación: sin cargos por ASC (Article Submission Charge) y APC (Article Processing Charge).
Reserva de derechos al uso exclusivo: 04-2022-041812514200-203
ISSN: 2594-2891
Formato de publicación: PDF
Indexada: Google Scholar, Latindex LatinREV, REDIB.
Número actual

A comienzos de la última década del siglo XX surgieron voces discordantes con la historia regional que estaba experimentando un notable crecimiento dentro de la producción historiográfica. Las críticas giraron en torno a las ambigüedades y en el uso indistinto de ciertos términos como local, microhistoria y regional, así como en la confusión de tomar a las regiones como si fueran las entidades federativas (Miño Grijalva, 2002, pp. 867-868). Estas objeciones a la historia regional generaron distintas reacciones, que, si bien no estuvieron de acuerdo con Miño Grijalva, tampoco echaron en saco roto sus observaciones y a partir de ese momento se presentaron esfuerzos por enriquecer la definición de los conceptos de región y ciudad desde intensos intercambios interdisciplinares (Antonio Ibarra, 2002, pp. 241-243).